domingo, 5 de agosto de 2007

... y lobezno se pega ¡con Namor!

Lobezno 19. El acontecimiento Marvel del año. Guión: Marc Guggenheim; Dibujo: Humberto Ramos.
Así como lo oyen. Como me voy pillando los cómics de Marvel-Panini donde aparece en portada "Civil War" (que es por cierto TM, o sea que Marvel ¡ha registrado para uso comercial la Guerra Civil! ¡Cómo se entere Pío Moa! Hace años ya decía Juan Cueto que el cine y la literatura españoles tenían una saturación de nuestra guerra civil, pero ha nadie se le había ocurrido registrar la marca. Sólo Franco hizo algo parecido apropiándosela con los resultados conocidos. En fin, no nos perdamos en los paréntesis) y la portada no decía mucho del contenido, me encontré con la gratísima sorpresa de ver a uno de mis personajes favoritos del mundo Marvel: Namor, el hombre submarino, príncipe de Atlantis -bueno, ya rey. Humberto Ramos, dibujante con claras influencias del manga, es uno de mis favoritos de entre los que ahora trabajan en Marvel. Resulta que Lobezno ya es también funcionario público y en la bronca en la que anda se ve obligado a "bajarse" hasta Atlantis con un traje que le ha proporcionado Tony Stark, el Hombre de Hierro. Atentos a lo que salga este mes, porque tanto la anterior entrada como esta son de publicaciones del mes anterior.

Spiderman sale del armario ...

Civil War 2: La decisión de Peter Parker. Guión: Mark Millar; Dibujo: Steve McNiven; Entintado: Dexter Wines; Color: Morry Hollowell
Bueno, no tengo muy claro que esta del armario sea la expresión. Pero que se quita la máscara, seguro. Si no, atención a las viñetas. Sigue la guerra civil entre superhéroes. Por cierto que en McLaren también tienen la suya, según cuenta hoy la prensa. También entre superhéroes con sus máquinas. El número de "frikis" que sigue esa guerra es más que preocupante; nada que ver con los seguidores de las guerras Marvel. A lo que vamos, que en este segundo número de Civil War se hace oficial la ley que obliga a los superhéroes de Marvel a registrarse y pasar a ser funcionarios. El Capitán América, junto con algunos otros como Daredevil, pasa a la clandestinidad. Iron Man (el Hombre de Hierro, o sea, Tony Stark), cabecilla de los "pro desenmascarización", le ha hecho un traje superchulo a Spiderman y éste, que siempre fue un adolescente necesitado de alguna figura paterna (o materna, también) que admirar y seguir, se convierte también en adalid de los "pro funcionarización" y va y revela ante las cámaras su identidad secreta. Naturalmente a James Jameson, el director del Daily Bugle, le da un colapso (Los directores de periódico de los cómics no aguantan nada; ya quisieran parecerse a alguno de nuestro Mundo). Y todavía va el amigo Peter Parker y dice que si hay "alguna pregunta". Pues sí, muchas. De entrada: ¿cómo podrá Marvel Comics Group sostener su negocio si todos (o la mitad al menos) de sus superhéroes revelan su "identidad secreta"? ¿qué será entonces del jugo que los guionistas sacaban a esto de las dobles personalidades o las personalidades ocultas y sus conflictos? Según Joe Quesada, editor jefe de Marvel Comics, la vida de Spiderman ya está planificada para los próximos dos años. Y es que no hay nada como ser funcionario, ¡te da una seguridad! Aunque vivas en los USA. Ahora bien, ¿la cosa estará tan planificada para el resto de superhéroes de la casa? Y también ¿podrá resistir el país que el Capitán América viva en la clandestinidad? ¿Se relacionará con algún elemento peligroso del terrorismo internacional? En fin, todo son incertidumbres a estas alturas. Menos mal que en el mundo de los cómics de superhéroes todo es posible. Se muere, se vuelve a la vida ... La Masa (The Hulk) se encuentra ahora mismo en un planeta repleto de tipos como él pegándose vestidos todos de romanos. Lástima que vaya a perderse la guerra civil de sus colegas superhéroes. En fin, la vida sigue y ya lo dice la última viñeta: "continuará ...". Es lo único seguro.